1. Evita el contacto con productos químicos: No expongas tus joyas a perfumes, cremas, productos de limpieza o agua clorada, ya que pueden dañar el material y perder su brillo.

2. Limpieza adecuada: Limpia las joyas con un paño suave y seco para evitar rayaduras. Si es necesario, usa agua tibia con jabón suave, pero asegúrate de secarlas bien.

3. Almacenaje correcto: Guarda tus joyas en un lugar seco, alejado de la luz directa y la humedad. Usa una caja o bolsa de tela para protegerlas de rayaduras.

4. Evita golpes y fricción: Mantén tus joyas alejadas de superficies duras y evita realizar actividades físicas que puedan dañarlas.

Con estos cuidados, tus joyas de aleación se mantendrán en buen estado por más tiempo